Mostrando entradas con la etiqueta albóndigas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta albóndigas. Mostrar todas las entradas

miércoles, 22 de noviembre de 2017

Bocados vegetales

Esta semana he preparado estas bolitas vegetales, que están de vicio, la verdad, yo las he preparado con zanahoria rallada, calabacín rallado y unas hojas de repollo troceadas bien finitas, en crudo, todo en crudo. Ahora sí, las he frito, jejejeje casi nunca frío las croquetas, hamburguesas o albóndigas ya que suelo hacerlas al horno hasta que estén doradas, pero al tener toda la verdura cruda, éstas las he frito.

Si no te gustan con forma de croqueta, como las he hecho yo, las puedes hacer tipo tortita o hamburguesa, eso ya como tú prefieras.

Para darle sabor he elegido el combinado de especias Garam Masala, que me encanta y para darle consistencia y para que las verduras no se "desparramen" he utilizado la harina de garbanzo.

Esta receta la encuentro muy divertida sobre todo si tienes nenes pequeños en casa, van a disfrutar un montón si te ayudan. Vamos con esta receta taaaaaan fácil.

Ingredientes:

1 Zanahoria rallada finamente
1/2 Calabacín rallado finamente 
5 hojas de repollo quitado el nervio y troceado en juliana muy fina
Jengibre rallado (mejor si es fresco, si no, en polvo) 
c/n Harina de Garbanzo,
1 cucharadita de café de Garam Masala, 
1/2 cucharadita de café de cilantro en Polvo, 
1/2 cucharadita de café de cúrcuma, 
c/n de pimienta negra molida, 
c/n sal marina, 
Aceite de Oliva.

Elaboración:

Rallamos finamente la zanahoria y el calabacín y colocamos en un bol. A las hojas del repollo les quitamos el nervio o parte más dura que divide la hoja en dos, y cortamos en juliana muy muy fina el resto de la hoja.
      
Juntamos todas las verduras y mezclamos bien, salamos y empezamos a agregar la cantidad necesaria de harina de garbanzo amasando con las manos hasta que se forme una masa fácilmente moldeable con la que podamos trabajar las bolitas.

Una vez tengamos conseguida la consistencia necesaria añadimos a la masa la mezcla de las especias. Yo he elegido Garam Masala porque me gusta mucho, pero si no tienes, puedes añadir la combinación que más te guste (comino, ajo molido, etc....) y mezclamos muy bien con las manos.
Cogemos la cantidad necesaria de la masa para formar las bolitas, que dependiendo del tamaño deseado saldrán más o menos unidades. Yo te recomiendo que las hagas de bocado, aunque el tamaño croqueta tampoco está nada mal.

Una vez formadas todas las croquetas o bolitas, ponemos aceite de oliva en una sartén y cuando esté caliente las dejamos caer y freímos por todos los lados hasta que estén suficientemente doradas (recordad que la verdura está cruda). Colocamos en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. 
 
Tan solo te queda emplatar y disfrutar calentitas, están de vicio ☺☺👅 
Nosotros comimos estos bocados vegetales con un poco de veganesa (mayonesa vegetal) acompañados de seitán a la plancha con pesto de pipas. Cena completa 😋😋😉

"No pierdas el tiempo, no intentes cambiar a nadie. No puedes ni si quiera cambiar a las personas que amas... Solo puedes cambiarte a ti mismo".- Buda







martes, 7 de noviembre de 2017

Albóndigas vegetales

Hay mil maneras de hacer albóndigas vegetales, a mí me encantan las que hago utilizando los cereales (mijo, arroz…) y legumbres (lentejas, alubias, garbanzos) como ingredientes principales junto a las verduras, no son complicadas de hacer, están deliciosas, tan solo tienes que lograr cierta consistencia para que las albóndigas no se deshagan cuando las cocinas en salsa o en sopa. 

Las albóndigas vegetales de la receta de hoy, están hechas con gluten de trigo (ingrediente principal del seitán) que es lo que hace que tengan una consistencia carnosa y jugosa. Son fáciles y rápidas de preparar, versátiles y saludables (salvo que seas celíaco y no puedas comer gluten).

Por contra el seitán puede presentar algunas dificultades para realizarlo bien ya que si le añades demasiado líquido, te quedará un seitán pastoso como el pan mojado y no lo podrás trabajar; y si no le añades el líquido suficiente, te quedarás con un seitán gomoso como el chicle. Se trata de practicar y encontrar la textura adecuada y la que más te guste. Aquí encuentras mi receta de hacer seitán en casa con harina de gluten de trigo.

A estas albóndigas de seitán les añado patata y alubias que hacen que las albóndigas mantengan una textura suave y no gomosa.

Las acompañamos en esta ocasión con salsa tomato, pero puedes añadirlas a un plato de pasta o comerlas entre pan con un poco de ensalada.

Ingredientes de las albóndigas (para 4 personas)

1 patata media-grande (unos 225 gramos), pelada y a dados 
100 gramos de alubias blancas
1 cebolla mediana
3 dientes de ajo cortados 
2 cucharadas de shoyu o tamari
120 ml de caldo de verduras
130 gr de gluten de trigo
2 cucharaditas de pimentón ahumado
2 cucharaditas de orégano seco
3 cucharaditas de albahaca seca
4 cucharadas de levadura de cerveza

Ingredientes de la salsa tomato

2 cebollas grandes
4 zanahorias
1/4 de remolacha cocida
Orégano
Vinagre de umeboshi
Concentrado de manzana

Elaboración de las albóndigas:

Precalentar el horno a 200°C. Hervir la patata. Escurrirla y chafarla con un tenedor hasta conseguir un puré. Reservar para enfriar. 

Mientras tanto mezclar las alubias, un cuarto de la cebolla, 3 dientes de ajo, el shoyu o tamari y el caldo vegetal en un bol y lo trituramos con la batidora, quedando una especie de salsa casi sin consistencia.

En otro bol combinar el gluten de trigo con todas las especias (pimentón, orégano, albahaca), la levadura nutricional, puré de patatas y la mezcla de las alubias recién triturada. 

Remover bien la mezcla utilizando las manos, apretando la masa hasta que se forme una pasta homogénea.
Disponer porciones de la masa en las manos y formar las albóndigas redondeando la pasta. Colocarlas en una bandeja de horno ligeramente engrasada o cubierta de papel y hornearlas durante 20 minutos, dándoles la vuelta a los 10 minutos. 
 
Las albóndigas están listas para comer ya sea recién sacadas del horno o tras dejarlas enfriar y recalentar con la salsa después (enfriarlas ayuda a que tengan una consistencia más firme y carnosa).

Elaboración de la salsa tomato:

Cortar la cebolla en cuadrados grandes y saltear con un poco de aceite y una pizca de sal durante 5 minutos. Añadiremos la zanahoria en rodajas grandes y saltearemos unos minutos más, hasta que se doren. Pondremos laurel, orégano y agua hasta que cubran las verduras y lo dejaremos cocer 15-20 minutos a fuego medio. 

Batimos y vamos añadiendo la remolacha poco a poco, hasta conseguir el color deseado. Este paso es importante. No hay que añadir toda la remolacha de golpe, porque al tener ese sabor tan fuerte acapara la receta. Tan solo se pone la justa hasta conseguir el color rojo característico del tomate. 
 
Rectificamos el sabor añadiendo poco a poco vinagre de umeboshi y concentrado de manzana. Vamos probando hasta conseguir el sabor que deseemos.

Añadimos las albóndigas a la salsa tomato y calentamos y ya está listo para emplatar, que aproveche!!








"Aquello que para la oruga se llama fin del mundo, para el resto del mundo se llama mariposa."- Lao Tse





martes, 15 de marzo de 2016

Albóndigas de avena en salsa

Las propiedades de la avena hacen que resulte un alimento nutricional muy saludable disponible durante todo el año y que proporciona energía y fuerza a quién lo toma. 
La avena es un cereal muy resistente y que se cultiva en suelos donde otros cereales no pueden crecer, y que se somete a una recolección y limpieza para posteriormente venderla en copos o en hojuelas de avena. 

Tradicionalmente la avena se usaba para el consumo animal, pero su rica fuente de proteínas hace que el ser humano también tome partido y se beneficie de ella. Además es rica en hidratos de carbono de lenta absorción lo que permite saciar el hambre por lo que la avena resulta un buen apoyo para aquellas personas que desean perder peso. 

Muchas son las propiedades para la salud de la avena, siendo las principales: reduce los niveles de colesterol, es antioxidante, disminuye la presión arterial, refuerza el sistema inmunológico, regula el nivel de azúcar en sangre...etc. 

Así mismo, es habitual ver la avena en muchos productos de belleza o de cuidado corporal como jabones, leches hidratantes, cremas, champús…etc, es por sus propiedades beneficiosas para la piel, ya que mejora el picor producido por la psoriasis, la sarna, u otros tipos de dermatitis. 

Como podemos observar, la avena tiene numerables propiedades curativas y medicinales y para beneficiarse al máximo de ellas, se recomienda consumir el cereal en modo integral, evitando en lo posible la versión más refinada.

Ingredientes

para las albóndigas:
4 tazas de copos de avena
caldo de verduras (aproximadamente un litro, lo usaremos también para la salsa)
perejil (al gusto)
sal marina
2 cucharaditas de ras al hanout
2 cucharaditas de comino
2 cucharaditas de ajo en polvo.
pan rallado

para la salsa:
1 cebolla grande
2 zanahorias
1 hoja de laurel
1 pizca de pimienta
caldo de verduras (sobrante de las albóndigas)

Elaboración

El primer paso es preparar el caldo de verduras. Normalmente lo hacemos con zanahorias, cebolla, puerro, apio, hojas de col...., pero se puede poner lo que tengamos en casa, al gusto de cada uno.

En un bol se echan las cuatro tazas de avena, se añade el perejil, la sal, el ras al hanout, el comino y el ajo en polvo. Se remueve bien para mezclar la avena con las especias. 

Usando un cucharón, se va añadiendo caldo de verduras poco a poco, para no pasarse,  ya que el exceso no podremos retirarlo en ningún momento. Se va añadiendo y removiendo poco a poco, hasta que quede una masa manejable, que no sea muy seca.
 
Con las manos húmedas (si no se nos pegará la masa), vamos haciendo bolitas, y las pasamos por pan rallado. Una vez las tengamos todas se van friendo poco a poco. Se van sacando y se dejan en papel absorvente, para quitar el exceso de aceite. 
 
Mientras se fríen las albóndigas, preparamos la salsa. Picando la cebolla y las zanahorias finamente, en una cacerola grande se añade un poco de aceite de oliva virgen extra y pochamos la cebolla. Cuando está pochada añadimos la zanahoria hasta que esté cocinada también.
 
Añadimos las albóndigas, una hoja de laurel, y el caldo de verduras. Dejamos a fuego suave unos 10 minutos y listo para comer. 

 

Os sorprenderán!!! Que aproveche.





"Si caminas solo, irás más rápido; si caminas acompañado, llegarás más lejos". Proverbio chino